El capítulo que tenéis actualmente en la web es la segunda parte de los relativos al Tour de Francia, y en el se relata el backstage de una de las victorias que más me emocionó en la pasada ronda gala, la de Henrich Haussler que ya os comenté aquí.
Totalmente recomendable toda la serie de capítulos a los que nos gusta el ciclismo.
Por mi parte tengo la bici totalmente olvidada, sin darme cuenta me he metido en la vorágine de entrenar para algo a lo que sinceramente no sé si llegaré... un maratón por febrero /marzo. Las sensaciones del pasado MAPOMA liberaron a la bestia que llevo dentro :)) y ya llevo unas semanas con la mente puesta en adaptarme a la distancia de Filípides lo mejor posible por una vez en la vida (recordar que hasta ahora nunca he entrenado en condiciones para un maratón, a pesar de haber acabado 5 ó 6), esto es, contraviniendo todo lo que había hecho hasta ahora. De ahí que esté centrado ya en rodajes más largos de lo habitual, ritmos más tranquis y cierta disciplina en los entrenos, dentro de lo que puede uno disciplinarse.
Sinceramente no sé si llegaré, estoy cansado y no recupero, voy acumulando todos los días un poquito más, como el que echa un puñadito de arena a un montoncito. No sé si ese montoncito será una montaña cuando llegue el momento, que no sé cuando será.
Además, tengo que tener cuidadín con la rodilla izquierda. En la pasada primavera, en la preparación del Mapoma me dió algún toque y ahora me ha vuelto a avisar, levemente, pero hay que estar atentos.
Eso sí, poco a poco voy cogiendo el ritmo y algún entreno ya deja adivinar algún (utilizando la metáfora de moda) "brote verde".
No sé si llegaré y si lo hago si conseguiré mi objetivo, pero intentarlo no dudéis que lo haré.