27 minutos

La tensión bajo el arco de salida es insoportable, unos la alivian
diciendo tonterias y otros, como yo, permanecen callados
escuchando sólo la música y utilizando su ritmo para contraer las
piernas rítmicamente y no perder el calor. Las caras que nos
rodean son más que familiares, unos amigos, otros conocidos. "¿qué
tal estás?","te veo fino","¿estás preparando algo?","joder, vaya
nivel hay hoy, no falta nadie" son las frases que más se oyen los
diez minutos antes de la carrera, pero ahora, bajo el arco sólo
hay silencio.Estoy en segunda línea, son muchas carreras y ya sé a quién
estorbo en la salida y a quién no. Suena la bocina...
Bajamos por la recién remodelada avda. de Colmenar, por la zona
peatonal, vamos deprisa muy deprisa... efectivamente no he
estorbado a nadie y nadie me estorba... uno ya tiene callo en
estas lides. Las piernas se acogotan del susto, hacía tiempo que
no iban a esta velocidad, desde marzo no competían, pero aguantan.
Primer km 3'20''.
Nos dirigimos a la entrada de Tres Cantos, el empedrado del
ayuntamiento obliga a correr unos metros de puntillas, la carrera
va poniendo a cada uno en su sitio, qué curioso es esto, me pasan
los de siempre y paso a los que tengo que pasar las piernas parece
que responden. Segundo km 3'40''.
Hemos girado 180 grados en la enorme glorieta de entrada a Tres
Cantos, correr en curva me recuerda a las 25 vueltas en pista de
hace 10 días.... ya me he cruzado con los primeros, animo a Álix,
va delante para no variar, me saca una distancia honrosa pero
irrecuperable, más que lógico para ir por el 3 km. Oigo algún
grito de ánimo con mi nombre, no reconozco las voces, la miopía y
la adrenalina no son buenas para ello. Tercer km 3'30ypico.
Bajamos la adva de Viñuelas, como siempre me he quedado cortado..
o no, "Recu", la tremenda corredora, me pisa los talones, curioso
igual que el año pasado en el mismo punto, bajamos juntos y me
aprovecho de los ánimo que le da el público. Los galgos ya suben,
Vega parece que no va fino hoy, "sólo" va tercero, cómo me
gustaría correr, por un día al menos, como ellos. Cuarto km otra
vez por debajo de 3'40''
Hemos de subir lo que hemos bajado, lo peor de la carrera. Al
igual que el año pasado descuelgo a Recu unos metros que no
recuperará. Se hace duro, poco a poco me acerco al grupo que me
precede, pero a cámara lenta. Salimos de la cuesta, pero ésta hace
mella en el crono. Quinto km a cuatro.
Cojo a un atleta de rojo, lleva buen ritmo. Me acomodo a su
espalda. "¡¡¡Tío bueno!!!" gritan unas quinceañeras. "¡¡¡El de
rojo!!!" aclaran. "Vaya por dios", me río... y el de rojo también.
A más de 16km/h corriendo y con ganas de gracietas. "¡Por ahí no!"
grito al de rojo, se confundía en una glorieta. Sexto km por
encima de 3'40'', me he acomodado y se hace jodido ir a por el
grupo de delante, muy lejos, en solitario.
En la esquina del parque me anima gente del club, la verdad es que
se agradece, nos metemos en una zona peatonal, no hay mucha luz.
El ritmo se ha acomodado, todos parece que damos por bueno nuestro
puesto. He descolgado algo al "tío bueno" y veo a Chema
relativamente cerca. El paso por km no está siendo todo lo rápido
que debiera, pero estoy en los puestos que me corresponden.
Séptimo km, entramos en la zona peatonal de nuevo, paso del crono.
Acelero, queda un minutejo hacia meta, adelanto a un par y me pasa
otro par, el de rojo uno de ellos. 27 minutos para algo más de 7
kms. Una media de unos 3'40''/km, claramente mejorable, pero el
circuito era duro y era la primera del axºño. Ya habrá más carreras.Choco la mano con Chema que me ha sacado unos segundos, con el de
rojo, con Pedro que me ha sacado bastante, no veo a Álix pero creo
que ha quedado entre los diez primeros.
Repaso mentalmente el calendario de las próximas semanas. Pensaba
que no iba a prodigarme mucho en las carreras este año, pero qué
coño, amo este deporte y me encanta ese picor en la garganta.

Sitios

El tiempo va dejando en la memoria sitios por dónde nos hemos dado una carrerita, por dónde hemos corpartido unos kilómetros con amigos o lo hemos rodado en solitario. Momentos imborrables que forman parte de las vivencias de uno mismo ya sea por lo especial del lugar o por lo especial del momento. He aquí algunos de los que no creo que olvide:

Pedriza, invierno del '2000poco', una manto de nieve recién caida reune a un puñado de corredores a recorrer los 16kms de la ruta que ya es un clásico de las navidades. Nos hundimos hasta las rodillas en la nieve. Inolvidable

San Francisco, 2005. El viento del Pacífico golpeando la cara, la niebla se aferra al Golden Gate justo enfrente mío y a la derecha la Bahía brilla incensantemente danto luz a la ciudad ¿Dónde hay que firmar para venirse a vivir aquí?

Innsbruck 2005. Otra vez la nieve. Justo el día antes un paisano me dice que apenas les había nevado y la noche le quita la razón dejando un manto que me dedico a desvirgar a las 7 de la mañana. Me cruzo con varios perros y los dueños se preguntan por qué sonrío de esa manera. Era increiblemente feliz.

Annecy (Alpes franceses) 2004. Una perla desconocida, un lago rodeado por los Alpes presidido por una preciosa villa encantadora. Nuria me acompaña por el carril bici. Las jóvenes parejas francesas con su prole se dirigen a las playas del lago y yo corro desbocado abrumado por el paisaje. Se me olvida que hay casi 30ºC...

San Vicente de la Barquera 2006. La escarpada costa a un lado, los Picos de Europa de frente y a sus pies esa pequeña villa cántabra reflejada en el agua del mar. Apenas me cruzo con nadie, son casi las 8 de la tarde y la marea ha dejado la arena brillante y dura. Se me olvida lo que duele que se acaben las vacaciones.

Central Park, NY 2003. Otro símbolo más de los contrastes de la cuidad. 10 kms de circuito por medio de un parque brutal rodeado de un bosque de cemento. La ciudad merece la pena ya sólo por ese parque. Nuria me acompaña en bici, sabía que soñaba correr por ese parque y disfruta tanto como yo.

Regent's Park, Londres 2001. 6 de la mañana, 11 de septiembre del 2001. Un viaje del doctorado me lleva a tierras sajonas y aprovecho para quedarme unos días y conocer Londres... y me enamoro de sus parques. Corro pegado al estanque dónde el sol del amanecer me ciega, el intermilable manto de césped amortigua mis zancadas. Nuria duerme, yo corro.. ambos ajenos a lo que sacudiría el mundo unas horas más tarde.

.... ¿cuáles son los vuestros?

¿corres porque compites o compites porque corres?

Año 2001, más o menos, un joven y novato corredor navega por los foros de internet, en una incipiente comunidad de corredores populares que crece al unísono en número y conocimiento. Nuestro amigo ha descubierto hace poco el mundo de las carreras populares, los diezmiles, las medias maratones e incluso ha probado a correr, terminando rozando las 4 horas, un maratón. Picado por el gusanillo de la competición y con la sana intención de mejorar se empapa de los consejos de los internautas y de las revistas del sector. Que si planes de 5 días para bajar de 3h30', que si hoy tocan series, que si hoy toca rodajes largos. El "si hoy toca" pronto se convierte en la regla de oro que definía las horas que dedicaba a correr en lo que presuntamente era un hobby. Haciendo de tripas corazón corría muchos días a desgana por amoldarse al plan de turno, los dolores por el sobreesfuerzo se empezaban a acumular hasta que un día, se lesionó.

Durante el periodo de sequía se replantea su afición y se hace la pregunta que da título a la entrada de hoy:"¿corres porque compites o compites porque corres?". Claramente la opción que más le llenaba era la segunda y desde entonces fue la filosofía que aplica nuestro amigo cuando emplea el tiempo en salir a correr.

Casualmente, y cuando la experiencia le va descubriendo que las mejoras al nivel al que él se movía las dicta el paso de los kilometros, la madurez muscular y por qué no, la mental, es cuando mejora en todas las distancias indirectamente.

Y le da rabia y mucha pena cuando lee a principiantes como lo era él esclavizándose con planes ridículos, con metas absurdas,cayendo enfermos, lesionados y perdiéndose lo que debería ser, en esencia este deporte... ponerte unas zapatillas y disfrutar corriendo camino arriba camino abajo hasta llegar exhausto a casa.

Lo más duro revisited

Se pregunta el amigo Bulderban en su blog, seguro que todavía con los dolores propios de haberse cascado la subida al Yelmo, que qué es lo más duro en lo que había competido él. Hoy, como me encuentro con falta de ideas y me parece una pregunta interesante le voy a robar el tema y me voy a preguntar lo mismo ¿qué es lo más duro en lo que he participado?

Lo primero sería ir a lo fácil y revisar los 5 maratones en los que he participado. La verdad es que el primero fue muy muy duro, básicamente porque no sabía dónde me metía y fui con una preparación con la que hoy quizás no haría ni una media maratón con garantías. El resto fueron incómodos ya sea por el fallo muscular típicos, por el infernal calor (millenium maratón) o porque 42kms son 42kms y son duros de por sí. Pero reconozco que lo he pasado peor en otras carreras.

Los crosses, la mayoría no pasan de media hora de carrera, pero qué media hora. Recuerdo hará unos años un fin de semana dónde me metí pal cuerpo dos crosses en dos días. Sábado en la Autónoma y domingo en los 8km por el parque de Tres Cantos. Qué manera de sufrir ese domingo... esos 8kms parecieron 80.... Y qué decir del último cross de la Autónoma, se me cruzarón los cables y llegué al límite límite.... pero no es lo más duro que he hecho.

Lo más duro, ha sido el superduathlón de montaña. Por candidez propia de la juventud pensaba que podía quedar muy bien clasificado en esa carrera y olvidando que era una prueba de larga duración salí escopetado en la subida en mtb a la bola del mundo. Tan escopetado que llegué más adelante de lo que mi nivel hubiese aconsejado. Pero la bajada por la loma del Noruego me puso en mi sitio rápidamente, y un reventón en la rueda trasera me relegó al último puesto. Llegando a Cotos, con todas las bicis ya en el área de transición, cabreado porque nada estaba saliendo como esperaba, salí a muerte hacia Peñalara. Adelanté a un puñado de corredores y ya de bajada a otros pocos.... pero fue justo volver a coger la bici cuando el viejo amigo, el asma, apareció consecuencia del sobreesfuerzo por recuperar el terreno perdido. Fueron unos kms cuesta arriba terribles de sufrimiento y de pensar en abandonar, pero casi hubiese sido peor. Los kms hacia el área de transición en la fuente de la reina fueron interminables, el plato pequeño ayudaba a que el esfuerzo no fuese muy grande y la necesidad de oxígeno fuese menor, pero me hacía avanzar despaaaaacio. En la transción apunto estuve de abandonar, pero "sólo" quedaba el camino smith corriendo para acabar con lo que seguí... no recuerdo cuánto tarde, pero era ponerse a correr y empezar a axfisiarme, con lo que exceptuando el último km hice el recorrido andando.
No llegué el último, pero casi, lejos de mis predicciones candidas y optimistas de la salida. Un buen rato tirando en el refugio del Peñalara intentando calmar la respiración y todo volvió a su sitio, pero aún hoy me duele cuando pienso en esa última hora de carrera. Y como dice mi abuela "¿y además pagas cuando corres?"

Pereza

Tocaba un caletón de 10kms, de ésos que o hago por el parque o por el circuito que tengo marcado por Tres Piedras que suelen suponer 37minutos y pico de caletonazo y que sirven para darle tonillo a las patas para las carreras que se avecinan, como la Nocturna de la semana que viene.
Pero entre que el parque estaba tomado por el Festibike, hacía mal tiempo y que los 38 y medio en pista del otro día ya fueron calentón suficiente pues los he cancelado.
Y es que cada vez cuesta más buscar razones para darse calentones así, debe ser que me hago viejo.

El fin de semana se ha reducido en dos salidas de 14,5kms a ritmo alegre, rondando esos cuatrominutosporkilometro, pero nada de calentones, que además la lluvia y el aire los hubiesen aplacado rápidamente.

Esta mañana visitita al Festibike a babear un poco con las bicicletas (especialmente con las Cervélo) y a sentir esa punzadita en el estómago al ver a los bikers en sus bicis de montaña camino al maratón (84kms), como hice hace 2 años, y pensar que hay un cabrón que está ahora con mi MTB dando vueltas por ahí tras afanármela del garaje.

Esta semanita por tanto ha sido:

12kms
11kms (10kms por pista + calentamiento)
12kms
14.5kms
14.5kms

Total: 64kms

Cawuen tó

Había escrito una bonita entrada en el blog sobre mis patas, el ciclismo, la contrarreloj de ayer, el tamaño de las patas de Cancellara, mi frustrado porvernir como ciclista... conmovedora realmente.

Pues le doy a "publicar la entrada" y va y se queda colgado. Pues que le den... paso de volver a escribirla, me declaro en huelga hoy.

PD.- ¿Alguien me alquila su bici de tri? Se me ha despertado la curiosidad después de ver la competición de ayer.

Papá ¿cuánto queda para llegar?

No os acordáis de esos eternos viajes en Simca 1200, por aquellas nacionales de sobre sentido llenas de curvas, sin radio en el coche. Cuando íbamos a Zaragoza, a la altura de Torrejón ya martilléábamos a mi padre con la preguntita de marras "Papá ¿cuánto queda para llegar?" y así cada 10kms por aquellas curvas detrás de los camiones.

Ahora, con las autovías, los coches cómodos y que el que conduce habitualmente soy yo, no había vuelto a tener esa sensación de cuando era un enano desde hace tiempo, hasta ayer.
Como sabréis ayer convergimos 5 corredores salidos desde todas las esquinas del universo internautico en la pista de Alcobendas a las 18.30 para dar 25 vueltas a la misma.
Tras breve calentamiento, la temperatura ambiente ya era lo suficientemente alta como para recalentarse, un pellejoso y peludo Luis, Esteban con su planta de IM, Matraco con su cuerpo de maratoniano escurrido, Iván con el sujetador eléctronico puesto y un servidor también sin camiseta nos ponemos en la línea de final de recta con el dedo en el crónometro dispuestos a que al lado de LAP ponga 25.

Nos ponemos a correr,alternando en la cabeza Esteban, Luis y yo. Iván y Matraco se lo toman con más calma (tíos sabios ellos). Una vuelta tú, otra yo, no pases por la curva que haces más metros... Pi, Pi cada paso por vuelta en guarismos parecidos 90-93 segundos, pero todo pasa muy lento. Así como Newton se percató de sus teorías con la caida de una manzana en su cabeza (al menos eso dice la física-romántica) estoy seguro que Einstein basaría su teoría de la relatividad haciendo un 10mil en pista.
Porque en la pista todo es relativo, los kms no son kms como en la calle, los segundos son más cortos que en el parque, el llano siempre pica para arriba y el aire siempre da de frente.

LAP va a marcar 13, en el paso del 200 llevaremos 5k, y parece que llevo toda la tarde corriendo. 19minutos y medio! joooder si mi paso en media maratón es infinitamente más rápido. Por si quedaba alguna duda correr en pista es diferente. Papá ¿cuánto queda para llegar?
Ya no sé dónde mirar, a los colgajos que antes eran unos michelines de Luis, a la espalda 3x3 de Esteban, a los pies del que me precede (mejor no que me mareo), a la cuerda de la pista, a los "rapidillos de Alcobendas", como Luis les llama, que nos miran como diciendo "a ver si terminan de una puta vez que nos toca hacer series".

Llevamos 20 vueltas, las piernas pesan, no he pasado el punto anaeróbico-killer del jadeo que caracteriza los diezmiles con dorsal pero tampoco voy sobrao, Esteban pierde unos 50 metros, los sebo-runners o pellejo-runners (a Mr España no nos vamos a presentar, está claro) nos alternamos tirando, el acuerdo de llegar juntos parece que se va a cumplir. Luis aguanta y tira como un javato, "por fin coincidimos en nuestro estado de forma pienso ". Último 100, nos ponemos en paralelo, aceleramos un poquito, nos damos la mano y LAP marca 25.
38 minutos y medio, lejos de lo que es asfalto hubiese arrojado, pero da igual. Al rato terminamos todos, nos cagamos en el calor, que tampoco era tanto, justo para llevar esa sensación de boca de cartón. Nos hidratamos, apretones de mano y para casa que la familia espera.

Un placer, el próximo 10k por el parque ;-)

¿A que es comparable ésto?

Que un alma caritativa me diga con qué se puede comparar este perfil. ¿Morcuera?¿el cerro de San Pedro?.... Es que no me hago a la idea
Es el perfil de una vuelta de Zofingen ;-)

La soledad de corredor de fondo

Frase manida donde las haya, pero que encierra mucho significado en su interior.
Justo a unas horas de quedar con un grupeto de amigos a correr 25 vueltas a una pista de atletismo -vaya manera de torturarnos más gilipollesca. Pero todo sea por ver a los amigos de vez en cuando, todo sea dicho- leo el blog del organizador de tan ...............(escriba en la línea de puntos su calificativo) evento, quejoso por no quedar más a menudo con gente para correr cuando virtualmente estamos todo el día acompañados.

Bien, un ser social, como pueda ser el humano occidental medio vería el comentario de querer correr acompañado como algo lógico. Pues puede que yo no sea un humano occidental medio, que puede ser cierto, pero en lo referente a correr prefiero la soledad

"Ves, si es que siempre ha sido un asocial", pensará algún lector que me conozca. Pero pocas cosas igualan la sensación de silencio absoluto de las frías noches madrileñas, con el único ruido del tap-tap de las zapatillas en el suelo y eventualmente el ruido de la lluvia sobre cabeza o el crujir de las nieve bajo los pies.
El sentimiento que el mundo se ha parado durante un ratito, que te has desconectado de él, y que te está esperando a que termines de correr para seguir girando me sobrecoge.

Sueños de una tarde/noche de verano

Apenas llevo un km corriendo de los 12 que tengo pensado correr hoy, las piernas se resienten de los ritmos del fin de semana e invitan a quedarse en casa. Pero un cortocircuito cerebral, la fuerza de la costumbre o yo qué sé hacen que sin darme cuenta ya esté pasando de nuevo por delante del McDonald's lleno de padres con pocas ganas de cocinar e hijos jugando con los pingos de su happy meal contrastando con mi correr desgarbado y el sol de fondo metiéndose un día más.

El portátil se ha quedado encendido en casa, con una última dirección escrita en el explorador, www.powerman.ch. No , no es un complejo de esteroides para dar volumen a mis inexistentes hombros o una competición de tíos de ésos que arrastran camiones con los dientes. Es la prueba que muchas veces sueño con hacer si algún día encontrase el tiempo y las ganas para entrenarla.

Entro en el polígono, pegado al Soto de Viñuelas, no quedan coches y tengo dos carriles más que anchos para mi solo. Parecen lejos los días en los que retrovisores de los coches pasaban alarmantemente cerca cuando corría por mi antiguo barrio. No puedo quitarme de la cabeza las fotos de la prueba que hacía unos minutos revisaba tranquilamente en casa. 150kms de bicicleta, en tres vueltas con tres tachuelas por vuelta y todo bajo un enorme chaparrón, como si no fuese bastante haber corrido 10kms, de todo menos llanos, antes de haber cogido la bicicleta. "Sergio, no te engañes, sabes tus prioridades y no ibas ni a poder ni querer invertir tanto tiempo en entrenar" concurrentemente mi cerebro hacía cuentas "dos salidas de 100-120kms en bici + 40-50kms a la semana corriendo me darían para al menos terminarlas, nunca has necesitado mucho volumen de entrenos, ¡aprovéchalo!"

Mis disquisiciones me llevan al final del polígono, la cuerda larga al fondo, el sol por detrás. Nunca me dejará de parecer impresionante. "30 kms corriendo después de más de 5 horas en bicicleta, ya has visto las clasificaciones, la bici se la cascan a 30km/h sólo un par de killers, el resto a arrastrarse" Mi cerebro sigue entreteniéndose haciendo más llevadero el paso de los minutos y olvidando los rastros de las molestias musculares de calentón del sábado.

"Mañana descanso" me digo a la altura del centro comercial "jeje, imagínate lo que debería descansar después de haber completado un 10-150-30. Las escaleras habrá que bajarlas ya no de lado, si no rodando. Pero tiene que ser maravilloso..."

Estoy de nuevo enfrente del McDonald's, pero esta vez en sentido contrario. Me queda algo más de un km para terminar, ha anochecido y refresca. Las piernas se han animado y el ritmo se ha alegrado bastante. Encaro la última recta, la que lleva a la renfe y posteriormente a casa. Esquivo a la gente que sale del tren sin perder el ritmo. Muchos me miran, como siempre con un "ande irá éste con tanta prisa" reflejado en la cara. Pero a mi me da igual, lo no saben que aunque ellos me vean en tirantes rozando sus maletines al paso, yo estoy en Zofingen, en los últimos metros, con la cara calada después de más de 8 horas de incesante lluvia apunto de cruzar la meta con Nuria y Hugo esperándome con una sonrisa en la cara preparados para darles un abrazo.

Resumen semana

La mitad de la semana ya la conocéis 14,5km + 12km + 14,5km. El fin de semana se ha completado con 12,5 de las vueltas del parque con las dos vueltas por debajo de 18 (17'45''+17'50'') en lo que ha sido un reencuentro con lo que más me gusta... correr "deprisa" (lo pongo entre comillas porque el término deprisa, como bien sabía Einstein es relativo, lo que a mi me puede parecer la pera para otros es un paseillo mañanero) con una media de 3'40ypico/km en ambas vueltas.

Hoy domingo 13kms por Viñuelas con las piernas un poco quejosas del esfuerzo del día anterior, pero el ritmo final no ha sido malo del todo.

Total 66,5kms

Descansito

Es lo que toca el viernes tras 41kms en tres días con 14,5kms como los del lunes, pero un poco más rápidos y sin ayudas químicas de por medio. Resumiendo 29kms a cuatropoco el km + 12kms algo más tranqui. Y así tengo las piernas, cual marmolillos, y la garganta obviamente sigue rascando, pero como no me dedico al canto...
Las sensaciones mejoran a medida que pasan los días y la temperatura baja, pero todavía queda un puntito de rodar más cómodo.

Lo dicho, el viernes a descansar a recuperar el careto toli de cansacio que llevo (una imagen vale más que mil palabras) y el sábado y domingo sesiones cañeras de parque para dar velocidad a las patas. Seguiremos informando

Hala, que se me acaba la batería del portátil y paso de ir a por el cable al salón...

Guía heterodoxa del entreno (I): los rodajes largos, maratón y demás...

Yo no sé por qué será, pero desde el primer día que empecé en esto de correr nunca me ha gustado correr más de hora y media. Se supone que me gusta correr y que, siendo así, cuanto más rato estuviese corriendo más debería disfrutar. Pero nada más lejos de la realidad. Cuando planeo algo por encima de esos noventa minutos la perrería empieza a adueñarse de mi cuerpo y termino por buscar alguna razón para no hacer la salida o por hacerla a regañadientes.
Y tengo razones fundadas, en toda salida larga termino con los músculos cargados y las rodillas doloridas. Sí, ya sé, hay que correrlas más despacio... pero es que correr solo y despacio se me hace insufrible.

Pues mucho tiempo estuve dándole vueltas, martirizándome con el "si quieres correr maratón tienes que correr largo" hasta que un buen amigo, que me conoce muy bien y ha conocido mi progresión corriendo me dijo "tío, tú haz lo que te haga disfrutar. Es un error juzgar al atleta por su rendimiento en maratón a cada cuál se le da bien una cosa. Si el maratón no te termina de gustar no te martirices".
Tomé sus palabras como un axioma y las llevo cumpliendo, más o menos, desde entonces ¿con qué resultado? Pues mirad, no me he vuelto a lesionar de importancia, he mejorado en todas las marcas hasta media maratón (e incluso en el maratón en uno que hice en plan lúdico apuntándome 4 días antes), disfruto más corriendo a diario y me agobio mucho menos (Quién diga que no se agobia al menos un poquito con los planes de entrenamiento y similares miente más que pestañea).

Otra paja mental más...

En próximos capítulos "las series"

Mi amigo el ibuprofeno

Mal pintaba la tarde de ayer, a pesar de la agradable temperatura que prometía el anochecer y las piernas fresquitas tras treintados horas de descanso un insufrible dolor de lo que mi galena particular define como "faringitis-crónica-¿tenéis-el-aire-acondicionado-muy-fuerte-en-el-trabajo?" (es que siempre utiliza la misma frase) parecía que iba a arruinar mi sesión de desgaste de las calles de mi Tres Cantos de adopción.
Uno que es un tipo recio y reacio al uso excesivo de la química, pero muy débil a lo que el correr y su adicción (abducción también valdría) implica, se acercó a su prescriptora de fármacos y susurrando, para que los alfileres de la garganta no se clavaran mucho en ésta, gimió "jay paya dame arrrgoo". "Busca en el cajón, que tiene que haber algún iboprofeno suelto, quejica". Revolviendo entre esa maraña de pastillas de todas formas, tamaños y colores, muchas de ellas procedentes de muestras de laboratorio (creo que tengo alguna viagra en casa, por si alguien la necesita) engullo esa pedazo de pastilla, del tamaño de una pizza hidrofilizada de las que comen los astronautas en el espacio y me voy al sofá a ver como el reportero de España directo sigue cocinando unas migas para luego zampárselas con la sonrisa profidén puesta.

Milagrosamente, a las 20.30, entono una escala entera "do-re-mi-..." y parece que es daño está resuelto o al menos encubierto. Me calzo las zapas, "hoy fácil que el cuerpo no está para hacer excesos" y salgo en dirección al polígono. Cuando llego al desvío que diferencia el hacer 12kms o pasar de la hora corriendo miro a mi casio y veo que la cosa va bien, por lo que engañándome, una vez más, "ya correré mañana suave"...

1h01'30'', entre 14.5 y 15kms... osea que a "4poco" y 19ºC en la puerta de casa. Bonitos números todos ellos.

Hablo bajito

Porque estoy como si hubiese estado cantando Paquito el Chocolatero toda la noche de ayer, con un dolor de garganta de los que ya se van haciendo recurrentes. A ver cómo transcurre el día, pero creo que las vueltas suicidas al parque de hoy se van a posponer por algo más suave o directamente por nada. Vaya rachita que llevo.
Ayer las piernas me invitaron a quedarme en casa y darme un paseo familiar para acabar la tarde cantando la Vaca Paca de Aravaca con el enano mientras éste se partía de risa -coño, a lo mejor el dolor de garganta viene de eso- Es increible como te suben las endorfinas viendo al enano reir, más que esprintando a 3'25'' en el último km de un 10k.

Por cierto, agradable sorpresa lo que depara el tiempo esta semana, ya no se ve ninguno de los treintaypico que ya me tenían aburrido

'Doloreh' y objetivos

Hay un método infalible para saber si los entrenos van haciendo mella o no y éste es bajarse del coche por la mañana. Si uno se baja de un saltito, aleeehop, cierra la puerta, dá al botón del mando remoto del cierre centralizado y ya, es que estamos en plan suave. Pero amigo, si al abrir la puerta, poner los pies en el suelo y empezar a mover los músculos que te permiten incorporarte los gemelos te recuerdan que existen, los isquios se estiran leeeentameeeente mientras imaginariamente éstos dicen ayayayayay y un "creo que debería estirar más" es lo primero que piensas antes de cerrar el coche es que ya estamos en harina.

Enharinados con los 66,5kms de la semana pasada (recordar que rara vez paso de los 70ypico en 5 días). Y ya que estamos vamos a marcarnos objetivos, esos que nos presionan y motivan a la vez.

Marco en rojo por ahora tres fechas:
30 de septiembre. Nocturna de Tres Cantos, 6kms para ir calentando las patas. Carrera agónica de las que antes se me daban bien, pero ahora me cuesta ponerme a ellas. La corro por ser en casa.
8 de septiembre: media maratón de Villaverde, mi antiguo barrio. Un poco pronto meter una media pero hace tiempo que no la corro y me apetece volver por allí de nuevo ya que le tengo cariño.
5 de noviembre: 10kms de Tres Cantos.

No marco el maratón de San Sebastián por ahora. La verdad es que se me van quitando las ganas y la inercia familiar a lo mejor no es la más adecuada ahora, pero no lo descarto.

Ahí quedan escritos.

Otra semanita

Ha caido otra semana más, muchos kms para estar a principios de temporada (qué profesional queda eso de "principios de temporada" ¿qué no?). Sigue el calor, no tan axfisiante pero todavía patente, como demuestran las obligadas paraditas a beber en cada entreno. Las sensaciones regulares, pero con la esperanza de que cuando las temperaturas bajen empiecen a ser mejores. Lo mejor el número de kms totales. Lo peor, un dolor en la rodilla (me chascó pasando la mopa por casa al agacharme a limpiar los bajos de la cama, manda cojones) y las sensaciones todavía no muy buenas. Además ha sido una semana muy "plana", los ritmos muy parecidos en los entrenos . El resumen:

12kms: Sin pretensiones porque el día anterior fue fuerte. Termino muy deshidratado por el bochorno.
12,5kms: 2 vueltas por el parque con malas sensaciones estomacales
13kms: Por Viñuelas.
17kms: Primer test serio de "resistencia". 3 vueltas al parque + i/v. Algo menos de 1h10' con los kms del parque a 4'/km más o menos. Termino cansado pero satisfecho por haber aguantado el ritmo a pesar de los calores. Estos 17kms suelen ser buen test para ver el ritmo para media maratón.
12kms: Soltando piernas del día anterior y con la solina del medio día en el cogote.


Total:66,5kms

Caño, eres grande

Es temprano, me tiran los femorales de los 13kms con cuestas de ayer, estoy sentado delante de mi ordenador para empezar la mañana del viernes y liquidar la primera semana de curro después de vacaciones. Como de costumbre, para coger fuerza, leo un par de blogs de amiguetes para comprobar que todo sigue en orden. Un link por aquí y otro por allá, me topo con la página de un amigo y leo en el menú de la izquierda donde lista sus andanzas "1250kms hasta París". ¿por qué será que no me sorprende?

Antonio es un tipo singular, le conocí hace unos años en el incipiente mundillo de corredores populares provinientes de elatleta.com. Y lejos de quedarse, como la mayoría de nosotros, en el encorsetado de las carreras de asfalto, de los parciales, los tiempos de paso desvió sus preferencias al mundo de la montaña, el ultrafondo, carreras por el desierto, por las landas francesas... y siempre con una sonrisa en la cara.

Je je , todavía me acuerdo las risas que nos echamos por las dehesas de Colmenar cuando decidimos ir corriendo, bajo el paraguas de las ideas de Luis desde Principe Pío a Manzanares el Real.

Es por eso que no me sorprende nada cuando repaso las fotos de su última aventura y le veo, pertrechado con su bici, extremadamente delgado sonriendo como siempre... cabalgando desde Burgos a París. Y leo su crónica siempre llena de optimismo y de alegría y me hace sentir como si fuese yo el que va montado en esa bici pasando por el valle de Loira, pedaleando bajo esas nubes negras para llegar a los pies de la Torre Eiffel y estar pensando ya en la siguiente aventura.

Eres grande tío.

Es que curte

Es lo que me digo cuando salgo a correr un día de mucho frío o con calor agobiante. Cuando parece que los elementos se alinean para que te quedes en casa pero haciendo oidos sordos vuelves a calzarte las polvorientas zapatillas.
Pero los autoengaños tienen doble filo, te sirven para tener la fuerza suficiente para darle la última lazada a los cordones y cerrar la puerta de casa pero, a su vez, este artificio mental que es el autoengaño no se puede utilizar ilimitadamente ya que el creador de los mismos no es tonto.

Y es que allá por el 2001, cuando me volví a prometer que no volvía entrenar nunca más en verano tras darme de morros con el Millenium Maratón -como otros miles de incautos populares-, no caí en la cuenta que la memoria la utilizamos sólo cuando nos conviene y este Agosto ya he vuelto a caer en el mismo error.

Llevamos unas semanas de calor insufrible, de bochornazo en la espalda e intentar calzar entrenamientos así ya sé a lo que lleva.

Ayer una vez más apagué el cerebro y con la excusa 'es que curte' salí con dirección al parque. Duchándome, hecho polvo con los pómulos hundidos, me acordé de ese 2001 y mi promesa... vamos a tranquilizarnos un poquito y esperar a que esto amaine que bastante nos da la vida como para que nos tengamos que curtir con otra cosa más.

Motivación

Dícese de lo que muchas veces hay que encontrar hasta debajo de las piedras para salir a correr cuando no tienes el cuerpo con ganas.

Lo normal suele ser no encontrar motivación para entrenar y las competiciones son lo que te echa a la calle casi todas las tardes para recorrer una y otra vez los mismos rincones, pero a mi me pasa al revés. No tengo problema para ponerme las zapatillas y practicar el famoso correrxcorrer pero sí me cuesta salir a correr cuando hay una competición en mente. Que si este ritmo, que si estos kms, arghh. Al final terminas con una obligación más a la que atender, como si tuviésemos pocas.
Es por eso que me prometí hace un tiempo salir a correr lo que me diese la gana y luego, si me cuelgo el dorsal, pues ver qué pasa. Y lo cumplo a medias. No soy un purista del entreno, pero tampoco me paro a ver los lirios en primavera (clara metáfora porque no sé lo que cómo es un lirio e imagino que florecerá en primavera) por lo que al final basculo entre una postura y otra en función de la época del año. Ahora estoy en la postura de comienzo de agobio por futuros retos con lo que, como uno ya lleva unos años en esto, estoy poniendo un poco el freno mentalmente.

Tengo otro truco, buscar los mails con las crónicas de carreras que hayan salido bien, no falla, te pone la motovación por las nubes, verbigratia (media de Getafe 2006):


Diossssssss qué rasca!-4ºC a la salida de 3C, -2ºC en la salida de la carrera y 0ºC en lallegada. Con los dedos de la mano se contaba la gente con tirantes lamayoría con manga larga, o con corta y tirantes. Yo, tras dudarlo unbuen rato, manga corta, pantalones atletismo y pa'lante. La elecciónfue la adecuada, no pasé ni frío ni calor, salvo en la cara, casi nopodía gesticular.La carrera pues de puta madre... Salida en muy buena posición, casidemasiado delante (primer km en 3'31" para no estorbar). A3'45'-3'50'' todo el rato con sólo un pequeño bache en el 11 poraquello que son dos vueltas y se hace duro pasar por meta cuandotodavía te quedan 10kms.El final de la carrera con una ampolla enorme en el pie izdo (si llegaser un maratón hubiese tenido que abandonar fijo) y una herida en eldedo anular del pie derecho, incluso he manchado las zapatillas desangre. Sin embargo no me ha afectado mucho al ritmo de carrera porqueha sido al final.Tiempo final 1h19'52''. Claramente, por mis entrenos en la media y enlos 15 rindo mejor que en los 10 dónde me falta mucha chispa (por nohacer series imagino).Me ha fastiado no poder correr con Pedro dado su amable ofrecimientode hacerme de liebre, pero no le vi en la salida ya que yo me coloquémuy delante.Os dejo los parciales:5km: 18'35''10km: 37'22''15km: 56'36'' (a sólo 29 segundos de los 15km de 3C, lo que confirmaque son duros duros)20km:1h15'49''Meta: 1h19'52''

Me voy a dedicar a los cursos de autoayuda, que se pagan muy bien

Con la camiseta por fuera

El baloncesto fue mi deporte de adolescencia. Horas y horas jugando en el parque con los colegas. Partidos a 5 canastas. El que ganaba se quedaba jugando y el que perdía daba paso al siguiente equipo. Y así hora tras hora, tarde tras tarde de esas lejanas vacaciones de 3 meses. Ajeno a cuál sería mi afición deportiva en el futuro, estropear el suelo corriendo.
En las antípodas de mis gustos está el fútbol. Por una parte está el deporte en sí, terriblemente aburrido y por otra parte la arrogancia, altivez y complejo de divo de sus protagonistas (me la suda generalizar, todos sabéis de lo que hablo).

A mi cerebro le sigue pareciendo paradójico cuando ve una concentración de un equipo futbolero y todos salen con sus trajes de diseño, sus gafas de a mil pavos el par, pelos engominados y se marchan a casa con coches tan grandes como el salón de mi casa. Paradójico porque no me casa con lo que yo entiendo que debe ser el espíritu que debe rodear a un deporte, sea cual sea éste.
Es por eso que ayer, cuando vi a la selección de baloncesto llegar a Madrid mi alegría fue doble, primero por haber conseguido el campeonato del mundo y segundo porque en esos chavales desgarbados, sonrientes, en vaqueros y con la camiseta por fuera nos veía a nosotros, a mis colegas y a mi, disfrutando de unas canastas en el parque de la city para luego irnos a tomar algo por ahí con el Seat Ronda (el crono, eso sí :-)) ) de Nacho.

Resumen dos últimas semanas

También he corrido durante estas vacaciones, quería esperar a la salida de esta tarde para contaros que tal se han dado estas dos últimas semanas de las que no os he hablado. Aquí va el resumen:

Semana de 21/8:

Lunes: bici 3C-Soto y vuelta a poco más de 30.5km/h de media. Para soltar
Miércoles: 12,5kms por el parque malos malos por la mañana.... que no me viene nada bien
Jueves: 14kms por uno de mis circuitos clásicos de invierno a un ritmo muy bueno para ser mañanero
Viernes: 13kms por el Soto de Viñuelas... mañaneros totales, es decir, mal
Domingo: 5kms sólo. Ya en Picos de Europa, la primera parada de las vacaciones. Era muy difícil encontrar sitio para correr sin tener que coger el coche, por lo que me conformé para matar el mono con ir desde Aceñaba a Cabezón de Liébana y vuelta en un recorrido en V, esto es, fuerte bajada y fuerte subida luego.

Total: 44,5kms carrera y 44kms bici

Semana 28/8

Martes: 10kms ya por San Vicente de la Barquera. Una pasada. Desde la parte alta hasta la carretera de la costa y vuelta. La carretera de la costa es un continuo sube-baja de impresionantes vistas.
Miércoles: 12kms por el mismo sitio pero llegando un poco más lejos.
Jueves: 10,5kms saliendo de la playa y llegando a la de oyambre por unos caminos bastante escarpados.
Viernes: 13kms. Cansado ya de tanta cuesta voy desde la parte alta hasta el final de la playa por ésta. Se vuela corriendo por esa playa
Domingo: 12,5kms por el parque. Tocaba más, pero los 34ºC de Tres Cantos a las 20h desaconsejaban hacer alardes, es por eso que decidí hacer las ya famosas dos vueltas a lo que el cuerpo diese con una agradable sorpresa 18'21' + 18'04''.

Total: 58kms

Ya'ta

De vuelta

Se han acabado las vacaciones, mañana vuelta al trabajo con mucho pesar. Han sido unas vacaciones fantásticas con Hugo como auténtico protagonista. Es un angelito y como tal se ha portado en esta última semana en la que hemos salido con él por primera vez fuera de casa. Ha sido una semana por tierras cántabras, tras 3 años seguidos viajando fuera de nuestras fronteras para pasar las vacaciones este año hemos vuelto a nuestros orígenes, al primer lugar que viajamos Nuria y yo cuando empezamos a salir.
Tres días metidos en Picos de Europa, perdidos en un pequeño pueblo cerca de Potes y otros cuatro en la ahora masificada San Vicente de la Barquera. Afortunadamente la casa rural que frecuentamos está cerca de viejo faro y allí se respira tranquilidad lejos del ajetreo del pueblo Bustamantiano.

He vuelto con la sensación que siempre vuelvo cuando visito esas playas y montañas, que es un lujo a poco más de cuatro horas de casa. Lujo de parajes y lujo de gentes, que viven lejos del estúpido ajetreo autoimpuesto de los que vivimos en Madrid...

Bueno, voy a dejar este tema porque siempre acaba con el "si me tocase la lotería" y me parece de lo más deprimente, más deprimente aún a unas horas de tener que volver al curro.
Siempre me queda el consuelo que mañana cuando vuelva a casa estará el enano, como siempre, con una sonrisita preparada.