Sigo vivo

Tras unos días de inactividad blogistica encuentro un ratito para contaros pocas novedades la verdad. Tranquilos que no os voy a aburrir con mis resumenes semanales porque son siempre más de lo mismo y quitando algún PB en uno de mis circuitos clásicos y otros 12kms por la ribera del río Inn bajo una intensa lluvia pero con una agradable temperatura, nada digno de mención.
Por cierto, es curioso el ratio hombres/mujeres entrenando en el resto de Europa, son más ellas que ellos...
Una pena que no haya podido salir a correr más por Innsbruck, es una ciudad preciosa y por el día hubiese sido de esos rodajes para recordar, presidido por las montañas que rodean a la villa austriaca, todavía con las cumbres peladas sin nieve, nada que ver con el frío y blanco Innsbruck que conocí hará año y medio. Cuando el enano sea algo más mayor quiero volver por esta zona y disfrutar de la nieve y el esquí de fondo.

En definitiva, ya hay ganas de volver a casa, se me está haciendo largo este viaje alejado de la familia.


Cambiando de tema. En un ejercicio de introversión y de revisión de prioridades he dejado a un lado la visita a foros de internet por un tiempo, siendo este blog, y los blogs amigos, la única relación virtual con el mundo del correr. Y debo decir, que casi que mejor porque últimamente leo unas cosas que se me ponen los pelos de punta, verbigratia:(simplificando muy mucho) "tengo flato y me duele al correr ¿qué debo hacer?. El médico me ha dicho que no corra porque puede ser debido a un problema de blablabla " y respuestas como "bueno, un compañero de club ha aprendido a correr con el dolor del flato e hizo x:xx:xx en la carrera de no sé dónde". En fin, podría ensañarme con este tema y "hacer amigos", pero paso, cada uno es mayorcito para sacar sus propias conclusiones.