Las maravillas del "foto shó"

Tras el entrenamiento de ayer consistente en un me quedo sopa en el sofá + voy cortarme el pelo + voy a mercadona + vuelta a casa y alimentar al enano nos sentamos a cenar tranquilamente Nuria y yo mientras vemos las noticias. Tras los deportes, la n-ésima crisis del Madrid (¿se les habrá acabado la gomina en el vestuario? o lo que es peor ¿el suviazante para el pelo?) una miscelánea de noticias de ésas para rellenar hueco: "Silvester Stallone vuelve con Rocky VI". "Imagino que como director" pienso, con esas pintas de haber engordado 30kilos, haberse hecho 12 liftings e inyectarse botox como el que come cereales para desayunar - vamos, que parece Carmen de Mairena - no creo que haya tenido huevos para ponerse de nuevo a lucir torso y a correr de madrugada mientras abren el mercado y le saludan los tenderos al paso "hey Rocky...". Habrá contratado un chavalín musculoso y ahora hará de entrenador o algo.... pos no... en el trailer de la peli sale el boxeando, pero lo más cachondo es que está cuadrado y da gusto verle.

Tal diferencia entre el Stallone de la peli y el Stallone Mairena sólo puede ser debido a:

- Los personal trainers de Hollywood son la pera.

- El café de la máquina de los estudios Paramount hizo estragos en el estómago de nuestro amigo Silver haciendo que perdiese 20 kilos y le saliesen músculos por todos lados. Cuando terminó el rodaje y volvió a desayunar en casa recuperó su estado actual.

- Han contratado a los mismos expertos de "foto shó" que han hecho que la "Gallega de Cancún", anoréxica que te cagas, aparezca buenorrona en el interviú (justo el amigo Bulderban escribe hoy sobre este tema) y le han echado más horas que un pastelero haciendo roscones antes de Reyes. Imagino que en lugar de botón derecho>poner buenorra habrán pulsado botón derecho>poner cachas.

Si lo sé les contrato para mi álbum de bodas, que salgo con una cara tonto.